La magnetita es un mineral mejor conocido por su propiedad de estar fuertemente atraído hacia los imanes. Algunas formas de la magnetita de locaciones específicas son, de hecho, ellos mismos imanes. Esta forma se conoce como piedra imán, y es el único mineral que actúa como un imán natural. Aunque su magnetismo es débil, es lo suficientemente fuerte como para atraer a grandes clavos. Debido a sus propiedades magnéticas, pequeñas partículas de hierro a menudo se encuentran aferradas a su superficie. Algunos comerciantes colocan intencionadamente en una piedra imán limaduras metálicas para demostrar su magnetismo.
La magnetita puede formar una capa de color amarillo-marrón óxido si se lava o se mantiene en una zona húmeda. Si se lava una muestra, debería secarse inmediatamente para evitar la oxidación. Además, las muestras deben ser almacenados en áreas secas por la misma razón. El óxido se puede quitar fácilmente empapando la magnetita con un disolvente de óxido.
El mineral hematita es conocido por formar pseudomorfos desde la magnetita. Estos pseudomorfos se conocen como martita y en apariencia pueden ser similares a la magnetita regular. Sin embargo, se diferencian de la magnetita en que están atraídos débilmente por los campos magnéticos y tienen una raya de color marrón rojizo.
Características de la magnetita
Su fórmula química es Fe2+Fe3+2O4
Está compuesto por óxido de hierro y puede contener muchas impurezas reemplazando parcialmente el primer y segundo hierro.
Sus cristales son generalmente octaedros bien formados, y con menos frecuencia, dodecaedros. También pueden ser una interesante combinación de los dos. Pocas veces son cristales cúbicos. Los cristales son generalmente estriados, y algunos octaédricos contienen capas en crecimiento. También pueden aparecer como masivos, granulados, en venas, como cristales redondeados o como grandes incrustados.
La magnetita es uno de los minerales de óxido de hierro más extendidos en el mundo y se produce en una variedad de entornos geológicos. Es un mineral de accesorio común en rocas ígneas, pero raramente forma cristales lo suficientemente grandes como para ser visto en muestras de mano. Más a menudo, la magnetita se dispersa a través de una roca en forma de cristales microscópicos que se forman a lo largo de los bordes de minerales de hierro tales como biotita, anfíboles y piroxenos. En esta forma dispersa, rara vez constituye suficiente volumen como para ser detectado por un imán de mano, aunque la roca puede exhibir una firma paleomagnética que puede ser detectada por instrumentos sensibles.
Usos de la magnetita
La magnetita es un mineral importante del hierro. Sus cristales perfectos también son populares entre los coleccionistas de minerales, y la variedad de piedras imanes magnética es muy popular entre los coleccionistas aficionados. Este mineral cuenta además con un interés científico significativo debido a sus propiedades magnéticas especiales.
Historia de la magnetita
Desde las rutas comerciales hasta la conquista, el desfile de la historia humana habría sido muy diferente sin las propiedades magnéticas de este mineral negro. Mucha gente asume que el nombre de la magnetita se deriva de sus propiedades magnéticas, pero el término ‘magnet’ (imán) en realidad proviene del mineral. «Magnetita» lleva su nombre por la región de Magnesia de Tesalia, Grecia, el hogar de los imánes y un importante centro de producción de hierro. La importancia histórica de los depósitos minerales de esta región se refleja en otros dos elementos, magnesio y manganeso, que también fueron nombrados por esta región.
Desde hace mucho, los dos minerales de hierro económicamente más importantes son la hematita y la magnetita. Aunque la hematita es más abundante que la magnetita, ésta última tiene un mayor contenido de hierro, por lo que los depósitos de mineral de hierro de magnetita son muy codiciados. Los depósitos de magnetita económicos se encuentran principalmente en capas de las rocas ígneas que se formaron desde el lento enfriamiento del magma, depósitos sedimentarios minerales pesados, y a comienzos de precipitaciones marinas del Proterozoico (hace 2.5 a 1.6 mil millones de años). El hierro de los depósitos de magnetita y hematita es la fuente del acero utilizada casi universalmente a través de la infraestructura física de nuestra sociedad moderna. Sin estos dos minerales, la sociedad humana, literalmente, no habría llegado a la edad de hierro, y mucho menos a la civilización moderna.
La importancia de mineral de hierro en la sociedad humana es más que obvia, pero la magnetita también ha jugado un papel más sutil, pero de todos modos históricamente importante en la civilización humana. Al principio, la gente descubrió que al golpear imanes de magnetita contra piezas de hierro se podría magnetizar este último. Este hierro magnetizado se utilizó para hacer los primeros compases, que expandió en gran medida nuestra capacidad de navegar los océanos del mundo. Así que la magnetita no sólo proporcionó la base para gran parte de la infraestructura de la sociedad humana, sino que también jugó un papel importante en la exploración y la ruta comercial de desarrollo, junto con las implicaciones históricas de una mayor interacción entre las culturas ampliamente separadas.
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